Género: Iguana
La iguana verde o iguana común es un lagarto arbóreo de América Central y Sudamérica. La gran extensión de su territorio comprende los bosques lluviosos del norte de México, América Central, las Islas del Caribe y el sur de Brasil.
También podemos encontrar poblaciones salvajes en Estados Unidos, en el sur de Florida, Hawaii, las Islas Vírgenes de los Estados Unidos y el Valle del Río Grande, en Texas.
Es con diferencia la especie más popular y reconocible de la familia de los iguánidos. Muchos conocen también a la iguana verde por su nombre científico, Iguana iguana.
Las iguanas permanecen activas durante el día, alimentándose de hojas, flores y fruta. Viven por lo general cerca de fuentes de agua y son excelentes nadadoras.
Si se ven amenazadas pueden saltar del árbol al agua, incluso desde gran altura, y escapar nadando. Son lo suficientemente duras para aterrizar incluso en suelo firme de una altura de 12 metros y sobrevivir a la caída.
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Imágenes de iguanas verdes
Es fácil comprender por qué tantas personas quieren tener una iguana verde como mascota. Aquí tienes una selección de imágenes de este espectacular animal.
Anatomía y morfología de la iguana verde
A pesar de su nombre, las iguanas verdes pueden adoptar diferentes colores.
En Perú se observan iguanas de color azulado con manchas azules. En islas como Bonaire, Curazao, Granada o Aruba, el color del animal puede variar de verde a lavanda, negro e incluso rosa.
Las de la región occidental de Costa Rica son rojas y animales de latitudes más al norte, como Méjico, se muestran naranjas.
Las iguanas jóvenes de El Salvador son a menudo de un azul brillante cuando son bebés, pero pierden esta tonalidad a medida que crecen.
Los animales adultos en la mayor parte de Santa Lucía, principalmente en la costa noreste, tienen muchas diferencias con respecto a otras poblaciones de iguanas. Son de color verde claro con rayas negras y en lugar de la típica papada anaranjada, las iguanas de Santa Lucía tienen una papada negra.
Las iguanas verdes tienen una fila de espinas a lo largo de sus espaldas y de sus colas, lo que ayuda a protegerlas de los depredadores.
Sus colas de látigo se pueden usar para lanzar golpes dolorosos y, como muchos otros lagartos, cuando se les agarra por la cola, pueden desprenderse de ella y escapar, desarrollando una nueva con el tiempo.
Además, las iguanas tienen una papada bien desarrollada, que ayuda a regular la temperatura de su cuerpo. Esta papada se utiliza en el cortejo y en disputas por el territorio.
A pesar de ser herbívoras, tienen unos dientes afilados capaces de rasgar hojas e incluso la piel humana. Estos dientes tienen forma de hoja, anchos y planos, con estrías en los bordes.
Características distintivas de las iguanas verdes bebés
Las iguanas verdes bebés, con medidas iniciales de 6 a 10 pulgadas, deslumbran con su patrón de colores intensos. A diferencia de los adultos, estas crías exhiben tonalidades más vibrantes, añadiendo encanto a su presencia.
Su comportamiento curioso y explorador revela un instinto innato mientras descubren su entorno con energía contagiosa. Estas características únicas evolucionarán a medida que crezcan, transformándose en las majestuosas iguanas verdes que conocemos.
Visión
Las iguanas verdes tienen una excelente visión que les permite detectar formas y movimientos a largas distancias. Como tienen solo unos pocos bastoncillos (células fotorreceptoras), presentan una mala visión en condiciones de poca luz.
Al mismo tiempo, tienen células llamadas de doble cono, que les permiten ver las longitudes de onda ultravioleta. Esta habilidad es muy útil al tomar el sol, ya que así puede asegurarse de haber absorbido suficiente luz solar en forma de rayos UV-A y UV-B, para así producir vitamina D.
Una curiosidad de las iguanas verdes es que poseen un órgano fotosensorial en la parte superior de sus cabezas conocido como ojo parietal, en contraste con otros reptiles que perdieron esta primitiva característica.
Este «ojo» solo posee una retina rudimentaria que no puede formar imágenes, pero es sensible a los cambios de luz y puede detectar movimiento. Esto ayuda a la iguana a detectar depredadores que ataquen desde arriba.
Tamaño y peso
La iguana verde es un lagarto de gran tamaño y es probablemente la especie más grande en la familia de las iguanas, aunque algunas del género Cyclura pueden llegar a igualar o superar su peso.
Las adultas alcanzan normalmente de 1.2 a 1.7 m de longitud de la cabeza a la cola. Como en el caso de todas las iguanas, la cola comprende la mayor parte de su longitud, mientras el resto del cuerpo mide de 30 a 42 cm de largo.
Una iguana verde adulta macho pesa alrededor de 4 kg, mientras las hembras alcanzan de 1.2 a 3 kg. Algunos machos de gran tamaño pueden llegar a sobrepasar los 6 u 8 kg de peso y hasta 2m de largo.
Tabla de Crecimiento de la Iguana Verde
La tabla a continuación muestra el crecimiento esperado de la iguana verde en términos de longitud y peso a lo largo de varios meses. Estos datos ofrecen una visión general de cómo estas iguanas suelen desarrollarse en sus primeros meses de vida.
| Edad (Meses) | Longitud Total (cm) | Peso (g) |
|---|---|---|
| 1 | 10 – 15 | 5 – 20 |
| 3 | 20 – 30 | 30 – 60 |
| 6 | 30 – 45 | 100 – 150 |
| 12 | 45 – 60 | 200 – 400 |
| 18 | 60 – 80 | 400 – 600 |
| 24 | 70 – 100 | 600 – 1000 |
¿Qué come la iguana verde?
Una dieta inadecuada es la causa más frecuente de problemas de salud en las iguanas. Debido a una mejor comprensión de sus requisitos nutricionales, la dieta recomendada para las iguanas ha cambiado mucho en los últimos 20 años.
Son estrictamente vegetarianas, tanto las más jóvenes como las iguanas verdes adultas. Concretamente, las iguanas son animales folívoros, es decir, se alimentan sobre todo de las hojas de los árboles. Además de las hojas, también consumen brotes tiernos, frutos y flores.
Evidentemente, si has adoptado una iguana verde como mascota no podrás proporcionarle los mismos ingredientes de su dieta natural. Es por eso que debes esforzarte por encontrar alternativas que cumplan con sus necesidades nutricionales.
La relación de calcio y fósforo en su dieta
El primer concepto que debes conocer es la proporción de calcio y fósforo (Ca y P) en su alimentación. Lo idóneo son aquellas verduras con el doble de calcio que de fósforo, es decir, una relación Ca:P de 2:1. También sería aceptable una relación de 1:1.
Estas proporciones son muy importantes de cara al crecimiento y mantenimiento de los huesos, contracción de los músculos y otras funciones importantes del organismo. Una dieta deficiente puede ocasionarles una enfermedad ósea metabólica, que puede llegar a ser mortal si no se corrige a tiempo.
La alimentación de la iguana verde es por lo general deficiente en calcio, ya que consumen pocas verduras con el doble de calcio respecto al contenido en fósforo, aquellas con una relación 2:1.
Vegetales y su relación Ca:P
- Relación entre 8:1 y 4:1 – Hojas de nabo, cilantro, repollo gallego, papaya, mostaza.
- Entre 4:1 y 2:1 – Repollo chino, col rizada, col rizada escocesa, lechuga, naranja, hojas de alcachofa, berro, repollo verde, higos, hojas de remolacha.
- Entre 2:1 y 1:1 – Puerro, limón, nabo, berenjena, ajo, apio, cebolla, nísperos, hojas de mostaza, judías verdes, repollo rojo, tofu crudo, tofu okara, pomelo, pomelo rosado, lima, frambuesas, arándanos, endivias, acelgas, mandarinas, rábano, manzana con piel, pera, mora, cebollinas, piña, acerola, caqui.
Las mejoras verduras para la iguana verde
Existen algunas verduras sin contraindicaciones y muy nutritivas para nuestras iguanas: hojas de mostaza, hojas de nabo, hojas de berza, hoja de diente de león, perejil, higos, judías verdes, guisantes, rábano, pimiento verde, puerro, escarola, zarzamora, peras, frambuesas, chirivías y tunas (fruto del cactus).
En cualquier caso es conveniente incluir una variedad de al menos 10 ingredientes en la dieta de nuestras iguanas. Además de los listados arriba, siempre puedes combinarlos con otros alimentos propios de tu zona.
¿Qué comen las iguanas verdes pequeñas?
Al contrario de lo que aseguran algunos medios, tanto las iguanas verdes bebé como las adultas son estrictamente vegetarianas y su dieta es básicamente la misma.
Lo que sí resulta conveniente es suplementar la alimentación de las iguanas jóvenes con vitaminas y calcio, para ayudarlas a potenciar su crecimiento.
Piensos para iguanas
Todavía queda mucho trabajo por hacer a la hora de determinar la composición ideal de la dieta de las iguanas.
Los intentos de elaborar una dieta equilibrada mediante piensos son muy recientes y todavía no han sido suficientemente probadas. Algunas iguanas alimentadas en exclusivo con estos piensos han tenido carencias en su dieta.
A día de hoy no existe una tabla con los requisitos nutricionales de las iguanas, por lo que ningún fabricante puede garantizar que su producto suple sus necesidades alimenticias.
Combinar el pienso con una buena variedad de frutas y verduras es la opción más segura para proporcionar a tu iguana verde una alimentación equilibrada.
Suplementos de vitaminas y calcio
Siempre es aconsejable añadir algo de suplementación en la comida que hayamos preparado, para evitar deficiencias en el animal. En el caso de las jóvenes añadiremos un poco al día, mientras que con las iguanas adultas es suficiente suplementarlas dos veces por semana.
Para el calcio debemos buscar una fórmula que contenga solo calcio y vitamina D3, evitando el fósforo. Los vegetales que come la iguana contienen más fósforo que calcio y hay que tratar de compensar este desequilibrio.
Si estás utilizando alimentos con una proporción Ca:P de 2:1 o más, no será necesario suplementar la alimentación de la iguana, solo en caso de recurrir a los más pobres de contenido en calcio.
El contenido en proteínas de los alimentos también es un factor a tener en cuenta en su alimentación. El grupo que más contiene es el de las legumbres, por lo que sería aconsejable incluir algunas en su dieta.
¿Qué alimentos son peligrosos para la iguana verde?
Las oxálicas son plantas con un alto contenido en ácido oxálico. Este ácido se combina con el calcio y no permite que el organismo de la iguana lo absorba, impidiendo su correcto desarrollo.
Algunas de las verduras oxálicas son la espinaca, la remolacha y sus hojas, la vara de apio, la acelga y el ruibarbo (tóxico para las iguanas).
Aunque este grupo de plantas contiene por lo general mucho calcio, este queda inutilizado al combinarse con el ácido oxálico, por lo que es recomendable no recurrir a ellas o hacerlo en pequeñas cantidades.
Las iguanas pueden consumir coles, pero es preferible no incluirlas en exceso en su dieta, ya que podrían producirles problemas de tiroides. Algunos alimentos del grupo de las coles son: col rizada, brócoli, coliflor, nabo, nabicol, repollo, repollo chino y repollos de Bruselas.
No es necesario evitar por completo el grupo de las coles, únicamente limitar su cantidad en la alimentación del animal.
Tampoco resulta aconsejable dar en exceso vegetales que contengan tanino. Este pigmento se adhiere a las proteínas de las enzimas, impiendo su correcta digestión e inutilizando la absorción de hierro y vitamina B12.
Demasiada cantidad de estos podría dañar el hígado de la iguana. Algunos de los vegetales que contienen tanino son: zanahorias, uvas, espinacas, bananas, cebollas, lechuga y ruibarbo, que como hemos indicado antes resulta tóxico para el animal.
¿Cada cuánto tiempo necesitan comer?
La mayor parte de las iguanas necesitan comer a diario, mientras que las más mayores puede ser alimentadas diariamente o cada 2 días, dependiendo del apetito individual de cada animal.
¿Qué requisitos de agua tienen las iguanas verdes?
Si bien es cierto que las iguanas obtienen de su alimentación buena parte del agua que necesitan, deben tener siempre disponible agua fresca y limpia. Las iguanas no solo beben de su bol para el agua, también ocurre que a menudo se bañaran en él.
Como tienen la costumbre de meterse dentro de sus cuencos, es importante utilizar un bol pesado que no puedan volcar con facilidad y terminar derramando todo el agua.
Debes cambiar el agua y limpiar su cuenco con regularidad, ya que las iguanas a menudo terminarán haciendo sus necesidades mientras se dan un baño.
También puedes rociar de agua a tu iguana con un espray unas cuantas veces por semana, para asegurarte de que se mantiene bien hidratada.
Cuidados de la iguana verde
Si nos decidimos por adoptar una iguana verde como mascota, es muy importante conocer los requisitos que debe cumplir un hábitat adecuado para estos animales.
Lo primero es reunir todo el material necesario antes de introducir la iguana en casa, de lo contrario podría terminar enfermando por carencias básicas.
A la hora de crear un hábitat idóneo para este animal, hay 3 factores fundamentales a tener en cuenta: el terrario, la temperatura y la iluminación.
Terrario
Una iguana bebé mide unos 20 cm al poco de nacer, mientras que en su etapa adulta puede llegar a alcanzar de 1,8 a 2 m de longitud. Un terrario para iguanas debe estar preparado para su rápido crecimiento.
Necesitarán espacio para poder moverse con libertad y así poder mantener su peso ideal y evitar enfermedades derivadas de la falta de espacio.
Es recomendable que el terrario supere al menos en 4 veces el tamaño de una iguana verde adulta. Además, como animal arborícola necesitará un terrario lo más alto posible, con ramas a las que trepar.
El suelo del terrario debe cubrirse con papel de periódico o césped artificial. La fibra de coco o las virutas de madera son materiales que se ensucian rápidamente y no se pueden cambiar con tanta frecuencia. El césped artificial en cambio, puede reemplazarse 3 o 4 veces por semana.
Para ofrecer al animal un buen hogar, es importante contar con los siguientes elementos:
- Troncos gruesos y resistentes por los que la iguana pueda trepar.
- Un cuenco de agua amplio, donde pueda meter su cuerpo completo.
- Otro recipiente para su comida lo bastante pesado para que no pueda volcarlo.
- No conviene colocar plantas naturales porque terminará comiéndoselas y las plantas decorativas pueden resultar tóxicas.
- Fuentes de luz y calor de unas características determinadas.
Además hay que asegurar un buen nivel de humedad en su terrario, bien mediante un instrumento llamado higrómetro, o bien rociando agua en el ambiente varias veces al día.
Temperatura del terrario
Los reptiles como la iguana verde son animales de sangre fría (ectotérmicos), por lo que son incapaces de regular por sí solos su temperatura corporal.
Proporcionarles una fuente de calor es fundamental para su metabolismo, su correcta alimentación, reproducción, etc.
En su hábitat natural se desplazan buscando el calor de los rayos del sol cuando necesitan aumentar temperatura, o se cobijan en la sombra si necesitan reducirla.
En cautividad podemos ofrecerles algo similar generando un gradiente de temperatura en sus terrarios, con un área más caliente que el otro extremo. Así la iguana puede moverse a través del terrario y calentarse o enfriarse, según sea necesario.
Su cuerpo completo debe caber dentro de cada gradiente. Esto es importante para una correcta termorregulación, ya que todo su cuerpo debe encontrarse a la misma temperatura.
Podemos comprobar estos gradientes con termómetros. Compra un par de ellos y colócalos uno en el extremo más frío del terrario y el otro en la zona más cálida, cerca de la fuente de calor.
El extremo más frío debería oscilar entre los 21º C y los 24 ºC, mientras el más caliente lo mantendríamos a una temperatura de entre 32ºC y 38ºC.
Su fuente de calor debe colocarse fuera del terrario, en la parte superior del terrario, que debe estar cubierta para evitar que la iguana escape o se queme con la bombilla.
Por la noche, cuando el animal duerme, no es necesaria una fuente de calor adicional, siempre y cuando la temperatura permanezca a unos 18º – 24º C. En la naturaleza, las temperaturas nocturnas suelen disminuir gradualmente.
También podemos colocar una manta térmica en uno de los extremos del terrario para mantener el calor. Habla con tu veterinario para aprender la forma adecuada de usarlas y así evitar quemar a tu mascota.
Estos son algunos de los productos más recomendables que puedes utilizar para proporcionarle una fuente de calor a tu iguana verde:
- Lámparas infrarrojas. Producen luz que no molesta a la iguana durante la noche.
- Lámparas focales diurnas. Estas producen luz blanca, por lo que solo deberíamos usarlas de día.
- Lámparas cerámicas. No producen luz y tienen una larga vida útil.
- Mantas térmicas. Son útiles para calentar la superficie del suelo. No deberían ocupar más de un tercio del terrario.
- Cables térmicos. Pueden enrollarse en las ramas o colocarse en la base del terrario. Estos cables a veces producen un calor excesivo, por lo que es aconsejable regularlos con un termostato.
Iluminación
Un reptil en estado salvaje pasa muchas horas al día tomando el sol, absorbiendo luz ultravioleta (UV) a través de su piel.
Esta exposición a la luz solar es esencial para que la iguana verde produzca vitamina D3, que necesita para una correcta absorción del calcio en sus intestinos.
La falta de luz UV puede predisponer al animal a una enfermedad ósea metabólica (EOM). Esta condición provoca la deformación de los huesos y aumenta su fragilidad.
Se trata de una situación por desgracia demasiado común y completamente prevenible, que resulta fatal si no es tratada adecuadamente.
Para poder ofrecer a nuestra mascota la iluminación adecuada, debemos adquirir una bombilla que emita luz en el rango UV-B (290-320 nanómetros). La luz UV-A (320-400 nm), aunque es importante en términos de comportamiento de la iguana, no ayuda a la fabricación de vitamina D3.
Muchas de las bombillas en el mercado indicadas para reptiles proveen tanto de luz ultravioleta UV-A como UV-B. La emisión de UV decrece con el tiempo, por lo que se deben reemplazar cada 6 meses.
Para que la luz cumpla con su propósito, debe llegar al animal de forma directa y sin filtrar, por lo que no debe haber vidrio o plástico entre nuestra mascota y la luz.
Esta luz debe estar a unos 15-30 cm de la iguana, para que pueda recibir todos los beneficios de la exposición a los rayos ultravioleta. Deberías dejar la luz UV encendida durante unas 12 o 14 horas diarias.
Estas bombillas pueden resultar caras, pero vale la pena el coste adicional, y a menudo, son la diferencia entre un animal sano y un reptil enfermo o moribundo.
La exposición a la luz solar del exterior es aconsejable siempre que sea posible. Cuando la iguana verde se encuentre al aire libre, hay que proporcionarle una zona de sombra, para ocultarse del sol si lo desea.
Mientras se encuentre fuera de casa es importante no dejarla sin supervisión, para evitar que pueda escapar o sea atacada por algún otro animal.
Enfermedades que puede padecer la iguana verde
Las iguanas pueden padecer algunas enfermedades propias de su especie; conocer y comprender estos problemas te permitirá un mejor cuidado de tu mascota y minimizar futuros problemas de salud.
Piedras en la vejiga
Ocurren cuando hay un exceso de minerales dietéticos en el organismo del animal, que terminan formando cristales en la vejiga y finalmente se aglutinan formando piedras.
En las iguanas estas piedras se componen normalmente de ácido úrico, que puede resultar de una dieta que contenga un exceso de proteínas. Otras causas incluyen la deficiencia de vitaminas A y D, deficiencia de calcio, exceso de oxalatos (se observa cuando comen muchas espinacas), deshidratación e infecciones bacterianas en la vejiga.
A menudo se puede observar sangre procedente de la vejiga irritada en los excrementos de la iguana verde.
Si observas estos síntomas acude a tu veterinario. La palpación del abdomen y las radiografías que realice, le permitirán diagnosticar este problema.
Si se detectan piedras en la vejiga de tu iguana, se hará necesaria la extracción quirúrgica de estas piedras por parte del veterinario para prevenir un daño renal.
Salmonela
Aunque normalmente se señala a las tortugas como las principales causantes de infecciones bacterianas por salmonela en niños, se ha comprobado recientemente que las iguanas son también un foco de infección.
La salmonela es una enfermedad zoonótica, lo que significa que puede transmitirse de animales a humanos. Una infección con esta bacteria puede causar enfermedades gastrointestinales graves, con náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal, fiebre o septicemia (infección en la sangre).
Las personas que corren un mayor riesgo son los niños, los ancianos y los inmunodeprimidos. Muchos animales y personas portal la bacteria sin mostrar ningún síntoma, pero aún así pueden infectar a otros a través de las bacterias que excretan en sus heces.
La mejor forma de prevenir esta enfermedad es mediante una higiene adecuada. Recuerda limpiar y desinfectar a fondo el terrario cada vez que se ensucie, así como retirar las heces tan pronto como las veas.
Es muy importante que te laves las manos a conciencia con jabón cada vez que sujetes, limpies o alimentes a tu iguana verde para minimizar los riesgos de contagio.
Como la mayor parte de las iguanas que portan la bacteria no enferman, normalmente tampoco requieren tratamiento (que, por otro lado, tampoco son muy buenos a la hora de acabar con la bacteria).
Necrosis avascular
Las iguanas a menudo se ven afectadas por una condición llamada necrosis avascular, que provoca que los vasos sanguíneos que abastecen de sangre un área del cuerpo se obstruyan, lo que lleva la muerte del tejido afectado.
En muchos casos, este problema ocurre en iguanas jóvenes mantenidas en condiciones de poca humedad. La baja humedad puede provocar disecdisis (retención de muda de la piel).
Las puntas de los dedos y el final de la cola suelen ser las zonas más afectadas. Sucesivas capas de piel que no se desprende pueden formar anillos alrededor de los dedos de los patas y la cola, lo que resulta en una restricción del suministro de sangre al área afectada y, finalmente, derivar en una necrosis avascular.
En poco tiempo, los dedos de las patas o la punta de la cola terminan decoloradas, la piel puede infectarse y morir, secándose y volviéndose dura. La necrosis puede acabar extendiéndose de estas zonas a las áreas circundantes del cuerpo.
Los vasos sanguíneos de las extremidades también pueden obstruirse por lesiones traumáticas que se infectan e inflaman, formando coágulos de sangre, o un tumor que corta el suministro de sangre a la cola o a los dedos de las patas.
A veces la causa no puede ser determinada. El tratamiento de esta enfermedad implica eliminar el «anillo» de piel muerta no desprendida. En los casos más graves puede ser necesaria la amputación de la zona afectada, en un intento por detener la propagación de la necrosis.
A pesar de todo, la mayor parte de mascotas se recuperan bien de estar intervenciones quirúrgicas y pueden llevar una vida normal.
Abscesos
Un absceso es una hinchazón infectada llena de pus que se encuentra dentro de un tejido del cuerpo. Los abscesos son muy comunes en las iguanas.
Se producen cuando las bacterias (más comúnmente) u hongos se introducen en el tejido a través de un traumatismo o herida por mordedura, un cuerpo extraño penetrante, un tumor o ciertos parásitos.
Los abscesos subcutáneos (bajo la piel) también se producen con frecuencia. El pus en los reptiles suele ser espeso, no líquido. Los abscesos a menudo aparecen como una hinchazón en algún lugar del cuerpo.
Se diagnostican mediante observación directa, palpación, punción o exploración quirúrgica. Se tratan mediante extirpación o punción y vaciado del absceso.
El material encontrado en el absceso generalmente se cultivará para identificar el organismo causante y determinar los antibióticos apropiados para eliminar completamente la infección.
Distocia
La distocia o unión entre huevos ocurre cuando la iguana hembra no puede expulsar sus huevos. Es un problema bastante común en los reptiles y puede llegar a ser mortal.
Es causada por una variedad de factores. Normalmente se asocia con un mal cuidado del animal, incluyendo una iluminación y temperatura inadecuadas, una mala ubicación del nido, una dieta inadecuada (desnutrición) y deshidratación.
Otros factores que contribuyen son la edad y el estado del animal, las lesiones u obstrucciones físicas causadas por huevos deformes, huevos de gran tamaño, anomalías físicas en el tracto reproductivo o la pelvis, infecciones, estreñimiento o abscesos.
Un lagarto grávido (cuando aún almacena los huevos en su interior) puede no comer, pero seguirá activo y alerta. Un lagarto grávido con distocia perderá el apetito también, pero rápidamente enfermará y entrará en un estado de letargo.
Es muy importante acudir a un veterinario que familiarizado con reptiles para que examine a tu iguana verde. Un examen físico, junto con análisis de sangre y rayos X, son el proceso habitual para su diagnóstico.
Pueden ser necesarios procedimientos médicos o quirúrgicos para ayudar a los animales que padezcan distocia.
A tener en cuenta antes de comprar una iguana verde
Los reptiles no son animales sociales por naturaleza. Al contrario que mascotas más habituales como perros o gatos, las iguanas no muestran demasiado interés en interactuar con los humanos.
Necesitarás mucha dedicación para que tu iguana pierda el miedo inicial y se acostumbre a ti. Si te esfuerzas en este sentido, el animal terminará por reconocerte como su dueño y disfrutará con tu presencia.
Cuando las compramos en una tienda, normalmente nos entregan una iguana baby, de apenas unos pocos centímetros de largo. Sin embargo, estos animales crecen año tras año hasta llegar a superar los 1,5 m en su etapa adulta.
Es importante no dejarse engañar por su tamaño inicial y ser conscientes de que pasados unos meses necesitarán un terrario de gran tamaño, como ya hemos visto.
Además del terrario, en este artículo has podido conocer todos los productos necesarios para garantizar que nuestra iguana verde tenga unas condiciones de temperatura, luz y humedad adecuadas.
Es necesario tener presente que todos estos productos cuestan bastante dinero y algunos, como las bombillas de luz ultravioleta, hay que reemplazarlos cada pocos meses.
Aunque podemos complementar su dieta con piensos especializados, es imprescindible que las iguanas coman frutas y verduras frescas como base de su dieta. Si compramos una iguana tenemos que tener en cuenta la obligación de alimentarla bien todos los días.
Y antes de adoptar tu iguana te recomendamos también que tengas localizado a un veterinario especializado en reptiles en tu zona, ya que son animales bastante propensos a sufrir enfermedades o complicaciones.
Si aún sabiendo todo esto todavía te mantienes firme en tu decisión de comprar una iguana, ¡adelante! A la hora de decidir dónde adquirirla, lo más importante es garantizar la legalidad de la venta.
Solicita al vendedor el número CITES (Convención Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre), una serie de regulaciones que se aplican a la compra/venta e importación de animales y plantas exóticas.
Se trata de un número de identificación que garantiza que la venta es legal, es decir, que el animal no se ha traído de contrabando desde su hábitat natural.
Es necesario combatir la lacra que supone el contrabando de especies exóticas, que pone en grave peligro de extinción a animales como la iguana verde. Nadie quiere ver desaparecer a estos maravillosos animales.